|  Intensa fue la semana del 3 al 9 de julio con motivo de la celebración de la XXX edición del Festival del Caribe, dedicado a Curazao y el Estado de Pernambuco. La prensa nacional y extranjera, junto a los especialistas de la Dirección Provincial de Cultura, se encontraron cada día desde horas tempranas en el Centro de Prensa Internacional ubicado en la “Casa Azul”, un hermoso edificio colonial, para ofrecer las noticias de última hora e informar al mundo sobre los sucesos que tuvieron lugar en este rincón del Caribe a través de trabajos especializados y entrevistas a los exponentes de las más diversas manifestaciones del arte y la cultura popular tradicional del Caribe y otras latitudes.
Desde este punto de la ciudad se trasmitió todo el acontecer del evento a través de los espacios radiales, televisivos y sitios web. Al calor del sol más refulgente de esta tierra, se vivieron momentos de acercamiento cultural y reconocimiento de nuestras raíces latina y caribeñas entre las distintas delegaciones, más allá de fronteras idiomáticas, religiosas o de otra índole.
En este entorno se realizó la primera transmisión en vivo de radio Estéreo 98 y Radio Dial, de San Pedro de Macoris, en la República Dominicana, para los oyentes del hermano país “donde cualquiera baila un son en la punta de una botella”, a decir de los dominicanos Ramón Perdomo y Manuel Ureña, quienes intercambiaron impresiones con representantes de la prensa santiaguera y directivos del Centro de Prensa Internacional, investigadores e intelectuales que ofrecieron su valoración de la presente edición.
Cada día el periódico Encuentro brindó detalles de las diversas opciones de la Fiesta del Fuego, así como valoraciones de espacios plasmadas en artículos, entrevistas y crónicas en las que se recoge todo el esplendor de cada manifestación presente en la magna cita.
Desde aquí se generó una amplia cobertura de prensa a los momentos más significativos del Festival del Caribe y quedó la impronta de cada una de las culturas reunidas en esta edición, que es la más nutrida en cuanto a participantes y presencia de los medios de comunicación cubanos y del Caribe, a la vez que se divulgó la convocatoria para la próxima edición de 2011, dedicada a Trinidad y Tobago.
Mercedes Acosta Fornaris, una de las periodistas encargadas del citado diario Encuentro, junto a la también periodista Aida Quintero Dip, ofrecieron sus impresiones para este espacio: “Considero -nos dice Mercedes- que la presente edición ha dejado huellas desde ahora mismo en la provincia y es un regalo para esta ciudad en sus 495 cumpleaños”. Planteó además que el evento se ha caracterizado por la calidad de las propuestas artísticas, la solidaridad, la amistad y la manifestación de los valores identitarios entre los pueblos, sin barreras para la comunicación entre todos los participantes.
Por su parte Aida Quintero opinó que el Centro de Prensa, ubicado en un entorno hermoso y muy representativo de nuestra arquitectura, tuvo entre sus actividades más importantes las conferencias de prensa ofrecidas por invitados al Festival procedentes de Curazao y Pernambuco, así como de Argentina, México y Trinidad y Tobago, con motivo de la dedicatoria del próximo año. Precisó también que esta edición ha estado a la altura de sus 30 años porque “se dice que el 30 es un número mágico y mágica es esta ciudad que recibió el arte diverso y rico del Caribe y más allá”.
Una vez más el Festival se fue a las calles y el pueblo lo asumió como suyo. Se insertó en cada una de las propuestas llevadas a cabo como el Taller de Pañuelos que ofreció la Casa de Curazao, el espacio culinario y los eventos teóricos tales como el coloquio “El Caribe que nos une”, donde se valoraron los procesos sociales de la región con una mirada académica, el Taller de Comunicación, el encuentro “Poetas del Caribe”, dedicado a la memoria del inolvidable Jesús Cos Causse, el Taller de Oralidad y las pinturas murales realizadas en los edificios del Centro Urbano José Martí.
También se presentó la exposición de los 30 carteles del Festival del Caribe, en la que sobresalió la muestra personal de Eduardo Guasch, dedicada al Poeta Nacional Nicolás Guillén, en la sede de la UNEAC, en la que se recrea toda su obra a través de esculturas muy sui géneris que simbolizan el carácter del criollo.
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