“Este puerto!
Y siempre este puerto que me mira
y me habla;
y que puede atraerme más y más, y tal vez más,
que un cuerpo núbil de muchacha trigueña.”
El puerto de San Pedro de Macorís, que su uso y re-uso data de la segunda mitad de 1800, cuando esa comarca, era conocida con el nombre de Macorís de los Plátanos, debido a la actividad agrícola que se realizaba en el área y el transporte de rubros importantes hacía la ciudad capital, que era su principal mercado y que se usaba la vía marítima y no la terrestre para el traslado de los mismos.
Desde Lilís, Mon Cáceres, Alejandro Woss y Gil, Isidro Bordas Valdez, Morales, Jiménez, el gobierno militar estadounidense, Horacio Vásquez, Trujillo, Balaguer y otros caudillos y gobernantes, supieron de la importancia del puerto de San Pedro de Macorís, y cada uno en sus momentos fue cómplices de la entrega de dicho bien común a particulares, a empresas extranjeras o a gobiernos.
Hoy día las cosas no han cambiado mucho, porque es poco lo que se sabe por ejemplo, de cuánto paga al fisco dominicano y en que medida se beneficia San Pedro de Macorís, del uso de más de mil metros lineales que ocupa la empresa Fertilizantes Químicos Dominicanos (FERQUIDO) desde hace mas de 30 años, teniendo para sus operaciones la mayor área que pueda ocupar empresa alguna en un muelle o puerto dominicano, lo que reduce su capacidad de comercialización, operaciones múltiples: atraque de embarcaciones, y esto por años ha sido ignorado por los residentes de esta parte de República Dominicana.
“Con su carga de peces fatales y vencidos.
Con su costa mordida siempre;
Y siempre mordida por el ancla del tiempo.”
¿Cuántos obreros en términos significativos tiene esa empresa en su nómina aquí en San Pedro de Macorís? ¿Cuáles programas ejecuta como parte de su “responsabilidad social”, con el pueblo de San Pedro de Macorís? ¿Qué tipo de material se recibe y en que medida no afecta la ría del Iguamo? ¿Es FERQUIDO propiedad de algún empresario petromacorisano?
¿Cuáles son esos empresarios? ¿Les permiten sindicalización a esos empleados y trabajadores? De FERQUIDO, pese a que tiene más de 30 años ocupando gran parte del Puerto de Macorís del Mar, por que siempre ha actuado de espalda a esta ciudad, poco se sabe.
Pero desde hace más de 20 años, hay otra empresa que ha venido usando y re-usando nuestro puerto. Primero tenía el nombre de Cemento Titán, fundada a raíz del repunte de La Sultana del Este, con la creación de la Universidad Central del Este y ahora, debido a que hace varios años pasó a capital mexicano tiene el nombre de CEMEX DOMINICANA. Esta transnacional, al igual que los anteriores dueños criollos, da uso desmedido al puerto, a tanto que unas investigaciones fiscales, motivadas por el arrendamiento a la empresa Inversiones Panamericanas de una parte de dicho puerto, se descubrió que por uso de una parte de esa instalación estatal debía CEMEX DOMINICANA, la friolera de 9 millones de pesos al estado dominicano, los que pagó por presiones de los funcionarios de esa área.
Y es que en la explanada frontal y otras áreas la CEMEX lo ha usado como si fuera un almacén de su propiedad, manipulando incluso a cielo abierto cemento al granel, sin que las autoridades de medio ambiente tomen carta en esta contaminación execrable que hace esta empresa, para estos días en que escribimos este artículo el barco COSUMEL, atracado en uno de los muelles, recibe unas 7 mil toneladas de cemento al granel, para ser embarcadas al exterior y otro de nombre DIEGO, con destino a Haití recibirá 2 mil toneladas de cemento al granel también. Pero las patanas cargando decenas de toneladas de un material que no conozco y que parece clinker en días pasados, estuvieron transportando el mismo desde su fábrica hacia el puerto local, en franca violación a las leyes de medio ambiente, porque muchas de ellas iban derramando dicho material por las calles José Rojas y avenida Francisco Domínguez Charro.
“Puerto lleno de cruces y de penas,
enconado de espinas y miserias
para la lucha antigua del obrero.”
Es evidente que estas dos empresas: FERQUIDO y CEMEX DOMINICANA tienen ocupada la mayor parte del puerto de San Pedro de Macorís y de ninguna manera quieren permitir que otros operen allí. Sin embargo, los petromacorisanos lo que debemos interesarnos es saber qué impacto tendrá en el medio ambiente las operaciones de la nueva empresa. Tendríamos que preguntar ¿Qué ha hecho el Ministerio de Medio Ambiente, para que esa empresa no opere como ha operado por decenios FERQUIDO y CEMEX DOMINICANA? ¿Tienen tanto derecho esas empresas por sus años de contaminación del pueblo a impedir la operación de una nueva en el puerto petromacorisano? ¿Será sincera la posición que tienen algunos sobre la operación de Inversiones Panamericanas, o sería con el mero propósito de llegar a posiciones tibias, después de ciertas negociaciones y acuerdos?
“Oh! Puerto que te aferras
a mi silencio adusto,
Como un bajel partido a su propio naufragio.”
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