EMOCIONES COMPARTIDAS EN EL TALLER IRIS SAM ALVAREZ, EN SANTIAGO DE CUBA.
Tantos recuerdos en una mañana que no alcanzó. Ellas, Ana María Rodríguez y María del Carmen Fernández, nos hablaron de aquellos años, unos cuantos años de cuando compartieron con nosotros una buena parte de su vida laboral.
Ana María y sus andanzas reportando desde Bayamo, Holguín y desde cualquier “rincón” de la siempre añorada Santiago de Cuba, enseñando y aprendiendo a hacer el periodismo del día a día; la “Gallega” María del Carmen, que fue de las primeras corresponsales santiagueras que nos reportaron desde el África, sigue siendo modesta al recordar el que fuera su principal compromiso: el asumir desde muy joven la subdirección informativa de la radio y que lo hizo con tanta nobleza y con muy buenos resultados.
Y se emocionaron mucho y los allí presentes, sus compañeros de antes y después, también se emocionaron; y nos hablaron de cuando se iniciaron en el periodismo, allá en Tele Rebelde hace más de 40 años y en la CMKC Radio Revolución, donde la mayor parte de su vida profesional.
Las dos hoy nos recordaron el ABC de la cartilla de que, “el periodismo, además de oficio, es consagración”. Su historia y su ejemplo, fueron puntos de partida para que algunos de los que con ellas trabajaran y compartieran, dijeran las cosas más sencillas y emocionantes porque, de las menos agradables, que siempre habrá, no era necesario hablar en esta ocasión porque al fin y al cabo fueron las menos, o las de menor importancia, porque de no haber sido así, seguro estoy que no hubiesen sido las invitadas de honor en esta fecha del Taller Iris Sam Álvarez in Memoria.
Y entonces los más jóvenes, bueno, las más, porque estuvieron en mayoría, conversaron sobre lo que soñaron desde la academia y lo que ahora ser periodistas les viene confirmando y lo que no, y hablaron de liderazgo y de incomprensiones, y les pidieron a sus colegas, a los que “aparentan” ser los menos jóvenes y los más duchos en la materia, sus consejos sabios, y yo vi en ese gesto, además, el respeto y el deseo de ser como ellos, no en todas las cosas, pero sí en las esencias.
Y dieron las gracias “por tan linda oportunidad de permitirnos compartir con ustedes…” en este momento de homenaje a los trabajadores de la prensa “y por aceptarnos”, concluyeron.
No hay comentarios:
Publicar un comentario