La
iniciativa, depositada en la Cámara de Diputados, establece que el 5
por ciento del dinero proveniente de las ventas inmobiliarias del CEA
pasarían a la administración de la Asociación de Desarrollo de la
provincia cañera donde se hizo la transacción.
Agrega
que las asociaciones de desarrollo de las comunidades cañeras
destinarán el 60 por ciento a acciones sociales, como reparación de
casas, construcción de retretes, operativos médicos o cualquier otra
actividad que contribuya al desarrollo de esas demarcaciones.
Propone
que con el 40 por ciento del dinero restante se creará un fondo
patrimonial en el Banco de Reservas para hacerles préstamos a pequeños
colonos y a las microempresas que funcionan en las zonas cañeras.
Consigna
que para la administración y distribución de ese 40% se creará un
consejo administrativo compuesto por dos representantes del CEA, dos de
la Asociación Dominicana de Colonos Azucareros y uno por las
asociaciones de desarrollo de las comunidades cañeras.
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